El Día de Muertos es una de las tradiciones más emblemáticas de México y en 2008 se convirtió en Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO.
Singular por su forma de homenajear a los muertos, en México el Día de Muertos no solo es para recordar a quienes han fallecido si no, un día para invitarlos a visitar, convivir y festejar.
Esta perspectiva es lo que convierte a esta tradición en un festejo lleno de color, comida y música, sólo así se logra convencer a nuestros seres queridos de regresar y celebrar con nosotros, aunque sea una vez al año.
1.- Pátzcuaro, Michoacán
Los pueblos purépechas que rodean el lago de Pátzcuaro, son de las comunidades más arraigadas a esta festividad. La Velación de las ánimas sucede el primer día de Noviembre poco antes de la medianoche, los pobladores de la isla Janitzio salen de su hogar rumbo al cementerio de Pátzcuaro en canoas con redes que semejan mariposas iluminadas por velas.
La celebración original se ha transformado en una semana y media de actividades culturales con: conciertos, exposiciones, talleres y más.
Seguro uno de los mejores destinos para experimentar una celebración de Día de Muertos auténtica.
2.- Huaquechula, Puebla
Los festejos en este destino son famosos por sus espectaculares altares y la manera en que se mezclaron costumbres prehispánicas y tradiciones católicas.
Los altares de “cabo de año”, son dedicados a aquellos que fallecieron durante los meses previos a la celebración y tienen una estructura piramidal con 3 o 4 pisos.
El 1 de Noviembre a las 2 de la tarde las campanas del templo comienzan a sonar anunciando la llegada de los muertos. Caminos de flor de cempasúchil los guían a los hogares de sus seres queridos quien los esperan con las puertas abiertas para ofrecerles pan y chocolate.
3.-San Andrés Míxquic, Ciudad de México
En la Ciudad de México, hay un gran número de actividades, desfiles, exhibiciones y eventos culturales para celebrar el Día de Muertos. En el pueblo originario de San Andrés Míxquic ubicado en la delegación Tláhuac, esta celebración es una tradición que van pasando de generación en generación.
Aquí la celebración comienza el 28 de Octubre, día en el cual visitan aquellos que murieron en accidentes. Es muy importante haber preparado y limpiado casas y tumbas de antemano para dar la bienvenida a las ánimas, ya que si al regresar las ánimas encontraran el sitio sucio, se pondrían a limpiar impidiéndoles relajarse y disfrutar de su visita.
El panteón de San Andrés es el escenario principal, donde las tumbas son limpiadas, decoradas y adornadas con flores y comida para recibir a sus seres queridos. Por la noche todo el panteón es iluminado por velas y aromatizado por el olor de incienso.
La celebración de Día de Muertos, una tradición que varía de región a región, de pueblo a pueblo, pero con un fin común: Dar la bienvenida a las ánimas, celebrar y convivir en familia, vivos y muertos.
